El metal amarillo comenzó la nueva semana con un tono positivo y hasta ahora mantiene ese ritmo. En este momento, el oro se cotiza ligeramente por encima del nivel redondo de $3000, intentando mantenerse cerca de sus valores máximos. En gran medida, esto se debe a la inestabilidad geopolítica y la actual política arancelaria del presidente de EE. UU., Donald Trump.

El martes 18 de marzo, el oro alcanzó un nuevo récord, cotizándose en un rango de $3038–$3039. Las razones son el aumento de la tensión en Medio Oriente y las preocupaciones sobre los planes arancelarios del presidente estadounidense D. Trump. Estos factores clave refuerzan la demanda de activos refugio, en primer lugar, el "metal solar". El miércoles 19 de marzo, el oro se cotizaba a $3042,47, intentando subir aún más.

Según los analistas, el riesgo de una mayor escalada de la tensión geopolítica en Medio Oriente actúa como un viento de cola para el metal precioso y aumenta la probabilidad de que continúe la tendencia alcista de varios meses. Sin embargo, cierta sobrecompra en el gráfico del oro impide que los operadores coloquen nuevas apuestas alcistas en el par XAU/USD.

La mencionada sobrecompra del metal precioso indica que los participantes del mercado harían bien en esperar una consolidación a corto plazo del oro o un ligero retroceso. La reciente ruptura del oro y su consolidación por encima del umbral psicológico de $3000 indican que el camino de menor resistencia sigue siendo al alza.

Mientras tanto, cualquier corrección a la baja del oro puede considerarse una oportunidad de compra y mantenerse limitada cerca de los niveles de $3005–$3000. A esto le sigue un soporte en el rango de $2980–$2978, cuya ruptura provocará ventas técnicas y podría arrastrar el precio del oro hasta los $2956. En tal escenario, la tendencia bajista continuará y el metal precioso se dirigirá a un nivel de soporte intermedio de $2930 antes de que el par XAU/USD caiga hasta los $2900.

Aunque el metal amarillo sigue en ascenso, algunos estrategas de divisas creen que los inversores deberían prepararse para una ligera consolidación. Según Ole Hansen, jefe de estrategia de materias primas en Saxo Bank, no sería sorprendente si los precios del oro probaran el nivel de soporte inicial de $2956 o incluso $2930, ya que los inversores comenzarían a tomar ganancias en el nivel psicológico clave.

En este momento, el par XAU/USD ha entrado en una fase de consolidación alcista. Al mismo tiempo, el oro se cotiza cerca de su máximo histórico, ya que los "toros" han hecho una pausa y prefieren esperar los resultados de la reunión de dos días del FOMC, que se celebrará más tarde el miércoles 19 de marzo. Según las previsiones preliminares, la Reserva Federal dejará la tasa de interés sin cambios en el rango actual de 4,25%–4,50%.

El foco del mercado está en las previsiones económicas actualizadas y la conferencia de prensa posterior a la reunión de la Fed, donde los comentarios del presidente Jerome Powell serán examinados en busca de pistas sobre futuros recortes de tasas. Esto afectará la dinámica a corto plazo del dólar y podría proporcionar un fuerte impulso al metal amarillo.

Según O. Hansen, el crecimiento sin precedentes del oro desde febrero de este año ha sido impulsado por la alta demanda de los bancos centrales, la reducción de las tasas de interés a nivel mundial y la incertidumbre geopolítica. Cabe destacar que, en los últimos 12 meses, el metal precioso ha aumentado su precio en un 39%, y desde principios de 2025, en un 14%.

El rally de precios del oro ha cobrado impulso rápidamente desde el comienzo de este año. La política arancelaria del presidente de EE. UU., D. Trump, ha jugado un papel clave en esta situación. En tales circunstancias, el mercado del oro podría estar enfrentando una tormenta perfecta, según un analista de Saxo Bank.

"Los factores desfavorables actuales han aumentado los riesgos de estanflación, es decir, una desaceleración del crecimiento económico, un aumento del desempleo y una mayor inflación. Si la situación empeora, la Reserva Federal se verá obligada a flexibilizar las condiciones financieras. Ahora los mercados esperan tres recortes de tasas de 25 puntos básicos para finales de este año, aunque en enero solo se preveía uno", añadió O. Hansen.

Los precios actuales del mercado indican la posibilidad de que el regulador reduzca el costo de los préstamos en 25 puntos básicos en las reuniones de política monetaria de junio, julio y octubre. Este escenario proporcionará un apoyo adicional al metal amarillo.

Según observaciones de los analistas, la demanda de oro por parte de los inversores occidentales ha aumentado, ya que la guerra comercial iniciada por D. Trump y la imposición de aranceles a productos importados han presionado los mercados bursátiles. Al mismo tiempo, los precios del oro han subido un 14% desde principios de este año, mientras que el índice S&P 500 ha caído casi un 4%.

"Los grandes gestores de activos, especialmente en Occidente, necesitaban una fuerte caída del mercado de valores y señales de desaceleración económica para volver al oro. En 2022, muchos grandes inversores abandonaron el oro cuando las subidas de tasas de la Fed hicieron que mantener el metal precioso fuera demasiado costoso. Sin embargo, los temores de estanflación y la reducción de los costos de endeudamiento están atrayendo nuevamente a los participantes del mercado. Como resultado, los fondos están rotando desde las acciones hacia refugios seguros a corto plazo, como los bonos del Tesoro de EE. UU. y el oro", concluyó un analista de Saxo Bank.